viernes

...después de pasearte por mis ojos, viniste a tomar mi mano 
sin que medien las palabras, sobraban
como así las personas, las historias y los miedos
Así de simple, tomaste mi mano
caminamos 4 pasos entre la gente y luego nos perdimos 
la música nos encandiló y ya no fuimos sólo mano con mano, 
éramos cuerpo, miradas y palabras
malditas palabras que no hacen más que alejarme
maldito cuerpo que no deja de enchastrarse
tremendas miradas que se marchitan al intentar
que me convierta en voyeurista de vos
pero no, no soy tu espectadora
no quiero tampoco ser tu espectáculo
soy solo una andariega, que un día
tomaste de la mano...
Debería haber capturado el momento,
Mis pupilas no son fieles y tergiversan tus facciones
Debería detenerte en esos momentos
¿Qué me importa?
Sólo decirte:
¡Quedate ahí que mis infames ojos no podrán recordarte si no!
Pero…de qué me sirve una foto si no tiene tus silencios, tus pausas.
De qué me sirve si sólo tu agrietada voz expulsa de tus memorias esos detalles que recordas sin sentido sobre mí, sobre mi desbocada tormenta de palabras.
Ay…si tan sólo existieras como existen esos momentos!
Seguramente ya no serías tan musa, tan extraño
Tan “yo” a la distancia
Debería haber capturado el momento….

Evidentemente, por suerte, no lo hice
Pocas cosas son más insomnes que una duda
Tal vez la bronca, ni sé si la ansiedad acaso.
Seguro no lo es la angustia que diezma ojos y respiros.
No, claramente la angustia no.
La duda, es la nociva duda la que me mantiene despierta

La duda, maldita piedra hecha polvo que se aspira en casa respiro alejando al sueño, maltratándolo
Con sorna me mira y pregunta,
No tengo respuestas, la cama no ayuda y la puta duda me mantiene despierta